Entre sopores y escalofríos soñé con mi abuelo.
Tenía la barba crecida un centímetro, lo cual significa un estado de abandono importante en él.
Estaba en el comedor de su casa, en la ventana donde yo jugaba a tener rayos equis, con ese mismo sol que lo iluminaba en mi sueño.
Tenía un animalito a upa, no me acuerdo si era un perrito o un corderito pero era blanco.
Se reía.
Me desperté llorando como siempre que tengo fiebre.
Extraño a mi abuelo
Está vivo
pero está muy lejos.
2 comentarios:
No hay lejos
a veces
en un beso
bien dado
por teléfono
o sí?
Me gusta mucho este comentario
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